En internet podrás encontrar centenares de dietas y planes para perder peso, pero en la actualidad, una de las mejores maneras es con un método llamado déficit calórico.
En este post te intentaremos dar las claves para que conozcas de primera mano toda la información sobre este método, uno de los más utilizados a la hora de adelgazar y eliminar grasa corporal, efectivo y muy fácil de seguir.
¿Qué es el déficit calórico?
El déficit calórico significa gastar más calorías diariamente de las que consumimos, poniendo un balance negativo en nuestro cuerpo, que con constancia hará que perdamos peso progresivamente.
¿Quiere decir que debemos comer menos?, nunca. Lo primero que tenemos que analizar es nuestra alimentación, ya que dispones de nutrientes verdaderamente saciantes que aportan muy pocas calorías a nuestro cuerpo.
Y el segundo punto entra nuestro metabolismo, si es lento o es rápido, pero es un factor de tiempo nada más, el objetivo es conseguir el déficit en nuestro día a día para cumplir nuestros objetivos acelerando nuestro metabolismo, es decir, haciendo ejercicio.
Podemos resumir en dos puntos lo que es el déficit calórico:
- Ingerir menos calorías de las que gastamos cada día.
- Acelerar el metabolismo de nuestro cuerpo con la práctica de ejercicio.
¿Cómo calculamos el déficit calórico?
En referencia a este método, calcular el déficit calórico no es fácil, pero sí que podemos orientarnos con los siguientes datos para conocer cuando podemos estar en un balance negativo.
Metabolismo basal
El metabolismo basal consiste en calcular las calorías que gastamos en nuestra actividad diaria sin contar sesiones de actividad física, es decir, cuando vamos al trabajo, cuando vamos andando a comprar el pan y cualquier acción cotidiana.
Debemos excluir cualquier actividad que derive en un deporte, ya sea ir al gimnasio u otra disciplina deportiva, como bicicleta, correr, etc. En este artículo tienes una información más detallada sobre el metabolismo basal.
Termogénesis
Este concepto significa ni más ni menos que la práctica de deporte, cuando implicamos a nuestro cuerpo a una actividad aeróbica intensa donde deberemos de utilizar nuestros depósitos energía, realizando un gasto calórico muy alto en un corto periodo de tiempo.
La termogénesis puede variar en función del deporte que practiquemos, de nuestra edad, de nuestro peso en ese momento, por eso es importante tener un control de lo que gastamos en cada momento.
¿Y cómo podemos saber las calorías que gastamos en los apartados anteriores?
Anteriormente había que hacerlo de manera manual, pero en la actualidad y para facilitarnos la vida, lo mejor es una pulsera de actividad, que incluya GPS, para poder medir distancias que realizas, tu frecuencia cardiaca y muchos más datos, donde siempre los tendrás guardados en el dispositivo.
Echa un vistazo a ésta pulsera de actividad de Amazon, es de lo mejor y te proporcionará todo el gasto calórico del día, como cuando estás en reposo, como en movimiento, incluso en el gimnasio, un accesorio muy práctico.
Las calorías consumidas, el otro factor determinante
Las calorías que necesita nuestro cuerpo las conseguimos de los alimentos, un aspecto vital en nuestra vida, ya que los mismos son los que nos proporcionan la energía en nuestro cuerpo cada día.
Consumir un determinado número de caloría determinará que bajemos o aumentemos de peso, por lo que debemos de tener muy claro los alimentos a ingerir, basándonos siempre en la premisa de comer correctamente y no ingerir más de los que gastamos.
Aquí empieza otra tarea para calcular el déficit calórico, y es contar todas las calorías que ingerimos diariamente, tienes aplicaciones en el móvil con calculadoras de alimentos muy sencillas de utilizar, donde puedes ver en todo momento las calorías que aporta cada alimento.
Disponer de un buen déficit calórico, la clave para bajar de peso
Una vez que conocemos los aspectos de gasto calórico e ingreso calórico diario, con una simple resta podemos ver si estamos en un balance positivo o negativo. A continuación vamos a ver algunos ejemplos para verlo mucho más claro y ver cuál es la mejor opción para obtener un buen déficit calórico.
Si por ejemplo diariamente, en una dieta con nutrientes saludables, conseguimos una ingesta diaria de 1800 calorías, deberemos de gastar 1900 calorías para tener un balance negativo de 100 calorías diarias, lo que nos ayudará a bajar de peso y grasa corporal.
El caso anterior es el modelo ideal de un déficit calórico bien hecho, porque uno de los mayores errores es bajar mucho la ingesta de calorías, ponemos el ejemplo anterior, un gasto de 1900 calorías, pero una ingesta de 1200 calorías, con un balance negativo de 700 calorías diarias, con lo que la bajada de peso sería mucho más rápida.
Pero nos olvidamos que necesitamos energía, medida en calorías, para que nuestro cuerpo funcione correctamente, y si lo hacemos durante un periodo prolongado de tiempo, lo único que conseguiremos será dañar nuestro organismo, que se materializará en fatiga muscular, dolores de cabeza, falta de energía, perdida de motivación, entro otras muchas cosas.
Conclusión del déficit calórico
No hay que obsesionarse con la pérdida de peso, lo primero que debemos analizar es nuestra alimentación, y ajustarla a nuestro gasto calórico diario, por eso te recomendamos que confecciones una dieta llena de carbohidratos, proteínas y grasas de buenos nutrientes.
El segundo consejo que te damos es que practiques deporte, cualquiera, uno que te guste, que te apasione y te motive a ir cada día, uno que implique un movimiento extra diario en tu vida, esto hará mucho más llevadero el déficit calórico.
Y por último, nada de prisas, ve bajando poco a poco, ir rápido no es nada bueno, al contrario, es contraproducente, ya verás que constancia y teniendo un balance negativo, pero ajustado a tu ingesta calórica diaria, conseguirás llevarlo de una manera mucho más cómoda.